¿Quién dijo que la lectura veloz es difícil?
Sin duda, muchos creen eso debido a la falta de información sobre este tema y la capacidad que tiene nuestros ojos y cerebro.
En este artículo te damos algunos ejercicios para que comiences a transitar este maravilloso camino y saques todo el beneficio posible.
Lectura veloz: Prejuicios infundados
Es probable que si comienzas a hablar de lectura veloz o escuchas a alguien que lo haga, muchas personas digan que es una técnica que no sirve, falsa, sólo para perder el tiempo, que cómo se puede aprender o retener información, etc.
Es bueno que sepas y ojala todos en general, esperando que puedas compartir este artículo, que la lectura veloz ha sido investigada y testeada desde hace décadas. Comenzó a principios del siglo pasado y cada vez se extiende más, en todo el mundo. Esto quiere decir que si bien se inició como una práctica militar para soldados, hoy en día está avalada por varios centros estudiantiles de los cinco continentes.
La clave para una buena velocidad en tu lectura es la práctica, por ello es que te brindaré algunos ejercicios básicos para que puedas comenzar y experimentar por ti mismo lo que cambió tu vida.
Lectura veloz: Tres ejercicios principales
El primero de los ejercicios de lectura veloz es: localizar en un texto una palabra que haya sido seleccionada con anterioridad.
Si se trata de un artículo por ejemplo sobre fútbol, encontrar la palabra “balón” o “delantero”. Esto debes hacerlo rápidamente y asegurarte que las has encontrado todas. Para que te imagines, recuerda la herramienta “buscar palabras” que tiene el Word del PC.
El segundo ejercicio es: localizar información específica en el texto. Basándonos en el mismo ejemplo anterior, puedes ubicar los nombres de los jugadores o de los equipos. No olvides verificar el resultado de esta técnica.
El tercer y último ejercicio para doblar tu velocidad de lectura es: tomar una página de un artículo ya sea periódico, libro, o blog y ampliar gradualmente el campo de visión. Mayormente, los artículos se estructuran en columnas. Ir saltando de línea en línea de cada columna, y extender cada vez más la capacidad que consiguen ver tus ojos.
Puedes seleccionar la columna central y leer la primera y la última palabra. La siguiente opción es focalizar la vista en la tercera y la antepenúltima palabra.
Apóyate anotando tus tiempos y así ver tus progresos. Si lo practicas los ejercicios, tu lectura veloz habrá aumentado y mantendrás tu comprensión y retención.