Hábitos Para Ampliar El Campo Visual
En temas anteriores donde solemos hablar sobre lectura rápida, siempre nos consultan cuáles son los mejores ejercicios para ser un lector eficiente, ávido y sobre todo, más rápido que los demás.
Nuestra respuesta suelen ser similares: hay tantas técnicas como personas en el mundo, ya que no todas sirven o tienen la misma consecuencia en unos o en otros.
En el caso de reducir las fijaciones para captar más palabras con un golpe de vista, podemos compartir algunas de las más usadas y útiles, las cuáles deberás practicar a diario. Las conocerás en este artículo.
Lectura Rápida: El esfuerzo y la constancia
Antes de explicarte cuáles son las técnicas de lectura rápida aplicadas a reducir las fijaciones, es necesario que sepas que lo importante en este camino es la práctica y no decaer si no se consiguen los resultados esperados antes de tiempo.
Los procesos no son iguales para todas las personas, eso tenlo bien en cuenta. Muchos lectores de un día para otro doblan su velocidad de lectura y a otros, a diferencia del primer caso, les lleva semanas. Lo importante es no rendirse, seguir practicando y mejorando día a día.
La constancia y el hecho de ser estrictos con uno mismo son dos valores muy destacados en esta materia como en cualquier otra. Para ser un buen lector, hay que, justamente, leer. No se puede pretender aumentar la velocidad, comprensión y cantidad de textos si no se comienza leyendo al menos media hora al día.
Es necesario entonces: esforzarse para no volver a repetir los hábitos que no son buenos (como las regresiones y fijaciones en cada palabra) y además aumentar de manera gradual la velocidad con que se lee, con el fin de que los movimientos oculares también “estén entrenados”.
Lectura rápida: Ejercicios para eliminar las fijaciones en cada palabra
Una de las características más destacadas de la lectura rápida es que cuenta con muchos ejercicios que se pueden practicar por todos los que lo deseen según su dificultad o los objetivos planteados. En el caso de la eliminación o reducción de las muchas fijaciones, puedes intentar los siguientes.
En primer lugar, no comenzar los renglones del texto leyendo la primera letra de la primera palabra. Esto se debe a que desperdiciarás una gran parte de tu capacidad de percepción. Lo que está a la izquierda de esa letra es “papel en blanco” y no te sirve. El ejercicio es: comenzar leyendo desde la segunda palabra o en lo posible, las siguientes. Así, con tu campo visual podrás también comprender las que están a la izquierda.
Segundo: no realizar una fijación al final de cada renglón mirando las últimas tres letras de la última palabra, ya que de la misma manera que el punto anterior, desaprovecharás la información que pueden incorporar mediante tu campo visual derecho.
En tercer término, tener en cuenta los márgenes de la hoja y dejarlos de lado del sector que pueden ver tus ojos. En la mente se deben correr al menos un centímetro, así, extender los límites de lo que la vista puede alcanzar. Es muy bueno colocar la fijación en el medio de la hoja, con el fin de ver tanto a la derecha como a la izquierda con una sola fijación.
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